Sor Juana Inés de la Cruz, una de las más grandes poetas que ha dada América Colonial

Qué extraño silencio envuelve hoy el convento, o tal vez solo se deba al latido desbocado e mi corazón y la sangre alterada de mis venas. La Condesa acaba de irse, gracias a Dios, pues no habría podido seguir fingiendo que no pensaba en Concepción mientras hablaba con ella en nuestro código particular. A decir  verdad, no pensaba tanto en Concepción como en su cuerpo, la sensación de su piel en mis dedos. Quien fuera el niño que acariciaba ese noble seno. Sé que ella también experimento la súbita chispa de deseo cuando el niño reencarno mis pensamientos en su cuerpo. Ay de mi, celosa de un niño y de la inocencia con que expresa la necesidad del pecho de su madre.

Durante la visita una sombra oscurecía el locutorio, una sombra también relacionada con Concepción. La echo de menos y me preocupa su suerte. Con toda probabilidad, a estas alturas es esposa de alguien (si sobrevivió el viaje) y tiene un niño pegado a sus faldas como José se pega a la Condesa.

Extracto del libro EL SEGUNDO SUEÑO , Autora: ALICIA GASPAR DE ALBA. Sor Juana Inés de la Cruz, una de las más grandes poetas que ha dada América Colonial, fue una mujer excepcional que supo imponer su voz en un mundo de hombres. En este retrato intimo Juana Inés aparece  como una joven fuerte, beligerante y sensual, obsesiva en sus filias y sus fobias. Una dama extremadamente inteligente y culta, que tuvo el mundo a sus pies, y no obstante optó por alejarse de la corte para dedicarse al saber.